LA IRA

 

La ira nos empuja a liberar energía, a exteriorizarla porque convierte a nuestro interior en una especie de olla a presión. Cuando no abrimos para que se evapore puede causarnos mucho daño, contaminando al resto de emociones, pensamientos y conductas que generemos a partir de ese momento.

 

Como cualquier emoción, somos los responsables de ella y nadie es el culpable de la misma, a pesar de que nosotros sí la asociemos o la proyectemos sobre alguien.

Saber controlarla, canalizarla y desmenuzarla es parte de la Inteligencia Emocional, clave del bienestar.

Para trabajar esta emoción hemos elegido el tema de la danza, el baile, como medio a través del cual podemos tanto expresar como canalizar nuestra ira o enfado. 

 

A continuación, os mostramos algunas de las actividades realizadas:

 

ED. INFANTIL

 

Para empezar a trabajar la emoción primero fue necesario explicar que “ira” es sinónimo de “enfado”; a partir de ahí, conectamos la emoción con el color que la representa en el monstruo de los colores.

El siguiente paso fue originar una “lluvia de ideas” en la que bajo el título “Siento ira cuando…” participaron por turno todos los alumnos identificando y nombrando situaciones que les despertaran ira. Entre las numerosas aportaciones destacan -una vez cribadas por repetición o redundancia-, “Siento ira cuando alguien me quita un juguete”, “Siento ira cuando me castigan en mi habitación”, “Siento ira cuando mis amigos no quieren jugar a mi juego”, “Siento ira cuando tengo que jugar sola”, “Siento ira cuando me despiertan de mi siesta”, “Siento ira cuando alguien hace trampa jugando”, “Siento ira cuando pierdo en algún juego”… 

Una vez identificada la emoción, comprobamos a través del cuento de Mireia Canals “Cola de dragón”, que es posible expresar con nuestro cuerpo esa emoción tan intensa cerrando los puños, frunciendo el ceño o pataleando y cómo se puede volver a la calma después de reflexionar y relajarnos.

En otra sesión los niños escucharon, primero sin soporte visual, la obra de Stravinski “La consagración de la primavera”. Posteriormente pudieron ver la coreografía que acompañaba a la audición y sacar conclusiones sobre los sentimientos que provocaba la música en los bailarines y cómo expresaban emociones a través de la danza.

Cuento: “La Rabieta de Julieta”

 

Libérate de la ira con la danza:  La composición musical  utilizada ha sido La Consagración de la Primavera, a través de un fragmento de la película Fantasía de Disney en el que aparece esta pieza con imágenes del desarrollo de la vida en la tierra.

 

ED. PRIMARIA

 

Se ha trabajado esta emoción a través de los cuentos: “La rabieta de Julieta”, “El pulpo enojado” y “Cuando me enfado” .

 

El video del “Baile de la danza” les ha servido moverse con esa música expresando o imitando la música y el baile. 

 

 

 

Dibujos dónde expresar el enfado.

 

Actividades de expresión corporal. Los alumnos fueron caracterizados con ropa de color rojo, color más afín con dicha emoción, y han decorado sus mascarillas y rostros con la finalidad de expresar ira.

 

Como actividad final, se han realizado diferentes prácticas de relajación o vuelta a la calma a través de las técnicas de la tortuga o sesiones de yoga acompañadas de bailes sencillos.